Nuestra En-soñadora nos presta el sueño
con el que está trabajando:
Iba en autobús con más gente del trabajo,
recuerdo que la carretera era un poco complicada, pero llegamos bien. La casa
era tipo masía o casa rural, en la cocina había comida de todo tipo, recuerdo
embutido y una sartén con una berenjena que tenía muy buena pinta. Trabajábamos
ahí, había habitaciones para cada uno, tipo hotel.
Representaba que estábamos en Francia, creo recordar que no hacía muy buen tiempo, pero nos lo pasábamos bien. El sueño se repitió dos veces, aquello duraba unos días, después continuaríamos nuestro camino.
Representaba que estábamos en Francia, creo recordar que no hacía muy buen tiempo, pero nos lo pasábamos bien. El sueño se repitió dos veces, aquello duraba unos días, después continuaríamos nuestro camino.
Este sueño pertenece al ámbito laboral.
El simbolismo del autobús como transporte colectivo está
asociado a la necesidad de compartir proyectos o pensamientos con las personas
que nos rodean, cambios que realizarás con ese colectivo y la carretera
complicada muestra que esos cambios no tienen un plan demasiado bien trazado.
El hecho de estar en una especie de hotel apela al sentido transitorio de este
momento en el quizás nuestra soñadora esté distraída en temas de poca
relevancia dejando de lado las cosas importantes.
Al preguntarle por lo que simboliza Francia, para ella, me
comenta que algo superfluo, bohemio, términos que concuerdan y refuerzan el simbolismo
del hotel.
En este caso a nuestra En-soñadora le recomiendo que plasme
sus objetivos en un papel, con un orden de prioridades y se emplee a fondo en
su consecución ya que dicha situación, si se alarga en el tiempo acabará por
llevarla hacia una sensación de apatía, frustración y aislamiento.
Bárbara Ramos
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